Los caminos alternan constantemente superficies pedregosas y arenosas. Pero, lejos de ser filosas, las piedras presentan dimensiones normalmente medianas a pequeñas, con forma redondeada, lo que representa menos riesgo para neumáticos, pero mayor reducción al nivel de grip, sobre todo cuando la fina arena entra en escena.

Para enfrentar estos desafíos, los pilotos deben afilar su capacidad de lectura del piso, pero también requieren de una hoja de ruta muy precisa. Esto se debe a que los caminos y su tradicional fisonomía de estepa patagónica, presentan pocas referencias visuales en una zona de múltiples variables y cruces o bifurcaciones ciegos. 

Esta gran variedad de condiciones permite que la Vuelta de la Manzana sea una de las competencias más versátiles de la temporada, en términos de poder optar con itinerarios con muy poca repetición de tramos. Por ende, a mayor cantidad de pruebas especiales con una sola pasada, menor será el margen de error para los pilotos.

Aún con todas estas exigencias, el vigente campeón y ganador de las últimas tres ediciones de la Vuelta de la Manzana, Alejandro Cancio, describe por qué cree que tiene cualidades que le permiten afrontar la competencia con un buen nivel de confianza.

“Es una carrera con lugares de poco grip, pero a mi se me hace fácil correr ahí, porque como piloto, nací en esos caminos. Entonces, todo me sale muy natural, sin pensarlo tanto”, explicó el neuquino, quien marcha segundo en el campeonato RC2.

“Pero, de todas formas hay que estar muy atento a los cambios de pisos y al cambio de grip. En ese sentido, es una carrera parecida a la de Plaza Huincul, porque tiene muchos cruces y cambios de superficie”, agregó el actual campeón en alusión al Rally del Petróleo y los Dinosaurios. “Eso hace que la distancia de frenado y el nivel de tracción cambien en varios lugares, dependiendo del color que tenga el piso”.

“A veces, encontrás zonas que tienen pisos con arena, otras en las que la superficie parece talco y otros lugares que tienen bastante ripio. Entonces, son muchas variantes. Por eso, hay que estar muy atento y ser capaz de anticiparse a las reacciones del auto, para no perder tiempo. También, hay que estar muy concentrado con los cruces de caminos”.

Pero, incluso con su conocimiento en la Vuelta de la Manzana, el piloto del equipo PS Sport se distanció de cualquier etiqueta que pueda señalarlo como el máximo candidato a la victoria en la edición número 51.

“En mi caso, todo me sale de una forma innata, porque conozco mucho los caminos. Pero, al igual que yo, hay otros pilotos de punta que también los conocen bastante, así que no siento que tenga una ventaja con respecto a eso. Por eso, habrá que ir a fondo, de principio a fin, teniendo en cuenta todas estas variantes de cruces y de pisos”.

Por otro lado, el líder del campeonato en la clase RC-MR, Gastón Pasten, explicó que la Vuelta de la Manzana implica un duro desafío, en el que se necesita de una certera capacidad para aprovechar el camino y de una buena precisión a la hora de ajustar la puesta a punto.

“Ya he corrido tres veces en La Manzana y lo que más me costó el año pasado fue estar en los tiempos. Para mí, lo más difícil fue aprovechar un poco más los bordos externos, que están más blandos en algunos lugares y que a veces te permiten ‘usar’ más el camino. Hay zonas que te permiten arriesgar un poco más y otras que no. Por eso, hay que saber identificarlas y aprovecharlas”, dijo el sanjuanino.

El piloto del KS Rally Competición agregó: “Otro detalle que aprendimos de esta carrera fue el hecho de trabajar un poco más con la suspensión, sobre todo entre los distintos tramos, porque no son todos iguales. En algunos, el piso es un poco más duro, pero en otros es mucho más arenoso. Creo que, modificando un poco la suspensión, se pueden recortar varios segundos, sin tener que variar el estilo de manejo”.

“Con los cruces, ya estamos acostumbrados. Es cierto que el año pasado nos pasamos de largo en uno, pero cuando pasan esas cosas, normalmente son por falta de concentración o porque faltó trabajar un poco más sobre la hoja de ruta ¡Obviamente, vamos a tratar de mejorar eso para este año y buscaremos salir concentrados, con una hoja fresca en la cabeza!”, sostuvo el ganador del último Rally del Poncho.

En de la categoría RC5 se vive una situación particular, ya que después de haber ganado la 50° Vuelta de la Manzana como navegante de su hermano Martín, ahora Federico Maisonnave redescubrirá la competencia como piloto, mientras llega al evento ubicado segundo en el campeonato, a solo nueve puntos del líder, Manuel Torras.

“Mi preparación para La Manzana va a ser similar a las demás carreras. Trataré de aprovechar la experiencia qué hicimos junto a mi hermano en años anteriores y en el caso de la carrera, estudiar bien los mapas y caminos para saber las claves de los tramos”.

Por último, Federico Maisonnave agregó: “Va a ser muy importante que sepamos identificar en dónde hay que andar rápido y en dónde hay que cuidar más el auto, porque si bien los coches tienen mucha confiabilidad, al venir tan atrás en el orden de largada, hay que estar muy atento porque el camino puede sorprenderte”.

“Creo que lo importante para esta carrera está en adaptar el manejo, que es un poco distinto, porque normalmente el piso tiene menos agarre. Pero, también va a ser clave saber dónde acelerar y dónde no”, resumió el ganador de las primeras dos fechas en General Madariaga y La Rioja.

Fuente e imagen: Prensa Rally Argentino